El gran Concepción, jungla de torres de cemento y cristal, día a día consumido por el ruido de máquinas y el incesante oleaje del ir y venir de personas presas de un sistema monótono; ha comenzado a transformarse gracias al bregar del pueblo de Ohtaríma, quienes se encargan de mantener viva la magia durante los días oscuros y entregarla a todo ser que quiera vivir la hermosa Tierra Media.
Todo motor y bocina se transforma en relinches de corceles junto el rechinar de ruedas de carruajes. Los humos tóxicos pasan a ser los arcoíris que no esperan razón para existir. Las palomas estallan en colores dando a luz a las hadas escondidas bajo sus sucias plumas. Las torres ya se ven como montañas y los edificios menores son castillos, fuertes y aldeas. Los grifos comienzan a abrirse para engendrar fuentes de agua cristalina. El concreto agrietado pasa a ser el más verde de los céspedes y los baches son meras pozas y fuentes. Los árboles comienzan a caminar, son despertados por el canto de los juglares, que como alarma, van anunciando la llegada de los mercaderes, herreros, artesanos y guerreros.
Se van levantando las almenas: el portal que transportará a todo público que crea en la magia, en los cuentos de hadas, en las leyendas de los libros, a vivir la realidad de La Frontera de Guerra.
Como en años anteriores la feria estará ubicada en el pulmón verde de la ciudad, Parque Ecuador, Sector Cascada. Se anticipa desde ya que el aroma a pan amasado inundará las calles de la feria y entorno cercano, un movimiento estratégico del panadero que planea sorprender a todos con su festín pantagruélico!
Adultos, jóvenes y niños tendrán un sin de actividades a disfrutar: Cancha de tiro, Batallas campales con armas de acero, Duelo de Bardos, Búsqueda mágica, actividades teatrales, Concursos de trajes, Competencia de poesía, retratos, además de danzas con música en vivo.
¡Que se enciendan las fraguas! ¡Que se afilen cuchillas y se lustren los botines, se surzan las más finas vestiduras, que las cabelleras se trencen y las barbas se aceiten, que se viene el festival! ¡Llenad los carros, afirmad sus morrales, emprended la jornada hacia la frontera de Guerra, Ohtaríma y sus hermanos os invitan a la gran XI Feria Medieval!